jueves, 6 de marzo de 2014

LA MATERNIDAD DE LA A A LA Z: N DE NOMBRES

DE NIÑOS Y NOMBRES 

Pero vamos a ver. Si es que os lo habéis buscado vosotros. ¿Acaso pensábais que el tema de los nombres se podía tomar a la ligera? ¿De verdad creíais que escoger esos nombres para vuestros hijos no iba a tener consecuencias? Pues nada, ahora, a cosechar los frutos de lo que vosotros, padres irresponsables, habéis sembrado.

A uno le pusisteis nombre de arcángel, de origen hebreo y resonancias bíblicas ("¿Quién es cómo Dios?"). Y aquí empieza y acaba toda posibilidad de mansedumbre angelical, pues de querubín rechoncho de bucles dorados tiene poco, y de angelito tierno y delicado, aún menos. Ahora bien, de Arcángel guerrero, líder de las tropas celestiales en lucha contra las huestes del Averno, lo que quieras. Todo un auténtico matadragones. 

"Mamá, ya me encargo yo del pincho moruno"

 A otro le tocó un nombre persa, llevado por reyes y emperadores de este pueblo. De significado incierto, algunos apuntan a "El Represor", mientras que otros se inclinan por "El que protege". Sin duda, éste último es preferible, pero teniendo en cuenta la naturaleza belicosa de los reyes de antaño, en ambos casos subyace esa idea de reprimir lo indeseado o proteger lo querido por la fuerza y a lo bestia.

"Podría haber sido peor y llamarte Jerjes, como yo"

Y con el tercero ya os cubrísteis de gloria: un nombre latino, variante en gallego (y en otros idiomas) del principal dios romano... el de la guerra, cómo no. Significado: "hombre combativo". Y portado también por otros personajes ilustres y viajeros.

"A éste no me parezco un pimiento. No tengo mono, y a mi madre no me la quito de encima".

Nombres viriles (en vez de sumaros a la moda de los nombres unisex...), clásicos (si es que sois unos carcas), de toda la vida (en vez de inventaros vosotros uno, que ahora es lo más cool), de luchadores, conquistadores y guerreros. ¿Cómo entonces iban a ser los niños? Pues activos y enérgicos, destructores y duros, enérgicos y cafres, inquietos y bulliciosos. 

Y luego os sorprendéis cuando, en lugar de permanecer sentaditos y formales en el sofá, con la boca cerrada, la espalda erguida, y las manos reposando en el regazo, se tiran los tres de cabeza encima del Papi (o del incauto al que se le ocurra sentarse junto a ellos), al grito de ¡¡¡¡Gerónimooooooo!!!! o ¡¡¡A la cargaaaaaaaaaaa!!!! O si en vez de guardar la compostura y la calma, convierten la sala en un circo romano, un ring de Pressing Catch y una jungla -todo al mismo tiempo. O si en vez de pintar al óleo les da por hacer una recreación de depredador carnívoro al acecho de herbívoro despistado, al más puro estilo de documental de la 2. Por no hablar de los lugares públicos, donde inevitablemente nunca pasan desapercibidos. Y qué decir de su vestimenta, incapaces de mantener la camisa debajo del pantalón más de cinco minutos, ni el pelo bien peinado más de dos.
En fin, que ya el nombre de su padre indicaba por dónde iban a ir los tiros: del germánico, "lanza de Dios" (de los de su madre ni hablamos, pues más comunes y anodinos no podían ser).

Por lo tanto, si queríais niños más blandos y calmaditos, haberles puesto Salomón ("pacífico"), Noé ("descanso, paz"), o Plácido ("tranquilo, manso, sosegado"). Por ejemplo.


El resto de mi diccionario:

18 comentarios:

  1. Jajajajaajaj!!! Si es que los nombres dejan huella, eso es así!!!
    Yo puse a la mayor nombre de princesa (y las detesta), al mediano guardián de todas las cosas (es un tsunami que casi se carga la casa de bebé) y al peque, dispuesto a luchar... Ay, dios... la que me espera!! No sé... en mi caso parece que con los nombres esto funciona en plan psicología inversa... jajaja, veremos!!!!
    Una entrada preciosa, guapa!
    Un besazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ja, ja, psicología inversa total!!!
      Bueno, al final NO es el nombre el que hace a la persona, sino al revés. Y además, con los nombres de mis niños también hay geniales escritores, poetas y músicos (y seguro que también científicos) :-)
      Me alegro de que te haya gustado!
      Un beso :-)

      Eliminar
  2. Jajajaja qué buena eres... Recuerdo un profesor al que yo admiraba mucho que un día comentó muy indignado que no entendía por qué se nos ponían nombres sin traducción directa al español, como Rosa, Olmo, Libertad... Jajajaja qué crack. La elección del nombre es difícil y a veces una cag... total. Con Grandullón, que debería haberse llamado Ángel directamente, tenemos que aguantar la coletilla de " El Terrible" cada vez que decimos su nombre... En fin.
    Genial entrada, Isa! Un placer leerte, siempre.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tus palabras!!!
      Bueno, al menos hoy en día ya no hay esa costumbre abominable de endosarle al crío el nombre del santo que marcase el calendario... En mi época de teleoperadora recuerdo que teníamos un listado con nombres curiosos, uno de los que más me impactó fue María del Tránsito, una pena no haber tenido una hija para ponérselo... ;-D
      Un beso, Nieves!!!! :-)

      Eliminar
  3. Ayyyyyyyyyyyyy!!!!!! cómo me ha gustado este post!!!
    Y por si alguien lee mi comentario y no se ha fijado... que miren la frase que aparece debajo de las fotos... jijiji.... me partoooooo!!!
    Buenísimo!!! Pero los peques son unos santooossss.... es su madre la que es un poco rebelde :-P

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ja, ja, te moló lo del pincho moruno, ¿verdad? Y mira que no encontré la postal que nos mandaste de Luxemburgo (o Alemania, o por allá) con la estatua de otro St. Michael Dragonslayer :-)
      Santos varones, sí... no comment... :-) (es broma, sí que lo son, "demasiado buenos", según algunos).
      Besitos :-)

      Eliminar
  4. Muy buen post guapa!

    Por no hablar aparte de las influencias que pueden tener en ellos... ¡Las críticas! Y cómo le vas a poner ese nombre? Pues qué feo. Y no te gusta más X? Pues es más bonito y menos oído... ¿Pero me meto yo con su cara? Jajajajajajaja :P

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Por supuesto! Los opinólogos meterán baza en el tema, no te quepa duda! Que si le van a decir esto, que si le van a cantar aquello, que si rima con no sé qué... Buenísima tu respuesta "¿Me meto yo con su cara?", lástima que no se me hubiera ocurrido soltarla a alguno :-D

      Eliminar
  5. Vaya por delante que creo que uno de tus hijos comparte nombre (o muy parecido) con uno de los míos. ¡Otra coincidencia más! Jejeje...
    Te leo y muchas veces pienso que tu casa es un calco de la mía o viceversa.
    Nosotros los nombres tuvimos que debartirlos, hicimos contrato verbal y todo con el primero y el segundo. Con el tercero yo sólo di el visto bueno al que habían elegido el Tripadre y el Mayor.
    Pero es cierto que a veces buscamos el significado de ese nombre que tanto nos gusta y esperamos que el bebé lo cumpla un poco. En mi caso, con que se estuvieran un ratito, no sé, ¿20 minutos?, sentados en el sofá me conformaría, jajaja...
    No creo que haya cuarto, pero por si acaso, me apunto lo de Plácido o Noé, por si acaso... (ya sabes tú que sería niño ;-) ).
    Me encantó tu entrada y el humor con el que la has escrito.
    ¡Besotes!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡¡¡¡No dudes ni por un segundo que sería niño!!! Apunta también Oliver, que dicen que significa "paz" por lo del simbolismo de la ramita de olivo (y es más bonito que los otros, ¿no?)
      Ya recordaba que uno de los tuyos se llamaba así, por algún cruce de comentarios que tuvimos respecto al Melendi que me había copiado el nombre del niño (sería en algún Viernes dando la Nota, antes de que nos abandonaras, snif, snif) :-)
      Me parto con el contrato verbal, nosotros con el último hicimos una encuesta entre los familiares cercanos, y creo que el nombre más votado había sido Pedro o Alejandro, pero como a nosotros nos gustaba más el otro, pues se lo pusimos -obviamente, amañando los resultados, que para eso somos los padres.
      Me alegro de que te haya gustado esta entrada, a mí casi nunca me salen cosas serias :-D
      Un besazo!!!

      Eliminar
  6. ufffff!!! vaya donde te has metido!!! en camisa de once varas. No solo es el nombre....también los diminutivos, los acortamientos de los nombres, los posibles chistes fáciles, los apodos....

    Si es que tener un hijo no es fácil para nada, ni si quiera para poner un nombre

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ja, ja, es verdad!! Pero es que a cualquier nombre le pueden sacar la rima graciosa o el chiste fácil, así que lo mejor es ponerle el que nos guste, y punto!!! :-)

      Eliminar
  7. jajaja no no no no nooooo me hagas hablar de los nombres porque me llamo exactamente igual a mi mamá, y no me refiero solo al primer nombre, sino al segundo también!!!
    y cuando quedé embarazada y supe que iba a ser hombrecito, mi mamá empezó a sugerir nombres históricos tipo Sanzón jajajajaja :) por supuesto, nunca le iba a hacer caso, y hasta ahora me pregunto en honor a quién le puse el nombre que elegí...
    En honor a quién, en honor a nadie, en honor a él :)

    ResponderEliminar
  8. Los nombres.....el primero como Papá, mala elección, pero su padre quería. Ahora a aguantar con las confusiones y aclaraciones cada vez que los nombro.
    El segundo, nombre de Santo con tradición gallega. Fácil, pero cuando vamos a casa en vacaciones, lo llamas y aparecen 25...
    La tercera, nombre fuerte, como ella. Es el nombre de mi hermana, y además el favorito de mi marido.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo de los nombres repetidos es un tema espinoso! Mi abuelo, mi padre y mi hermano mayor tienen el mismo nombre (y apellido, claro), y cuando llamaban a casa había que hacer poco más que un interrogatorio para saber con quién querían hablar :-) Y que conste que a mí no me importaría haberle puesto a alguno el nombre del Papi, pero él no quiso! Y tampoco quiso poner nombres compuestos :-(

      Eliminar
  9. Jajajaja......menudo temita el de los nombres. Yo con el mío ando contenta, pero esta claro que no cometeré el mismo error que mis padres, poner nombres repetidos como si no hubiera surtido y variedad.
    Tengo que decirte que nosotros ya hemos llegado a un consenso mitad y mitad. Como era imposible de los imposibles ponerse de acuerdo con mi señor pelirrojo cada uno elegimos uno y santas pascuas!! jajaja...en fin, menos mal que seran dos sino nos tiramos los trastos a la cabeza...ajajajjaja.

    Besotes, Isa.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ja, ja, vosotros sí que sabéis!!! Recuerda: nada de nombres belicosos!!! :-D
      Un besito!

      Eliminar