El Mediano tiene la varicela. Se veía venir, puesto que en las últimas semanas muchos de los niños de su clase habían ido cayendo, uno tras otro, en las garras de esta latosa infección.
El miércoles le descubrí dos granitos en el hombro y otros dos en la cara interna del codo, pero no le dí ninguna importancia, pues el Mediano, curtido en dermatitis, impétigos y erupciones varias, casi siempre anda con granitos, cuando no es en los brazos, es en los mofletes; cuando no es por el frío, es por el sudor y el calor. Y cuando no, es por la picadura de algún bicharraco, se ve que tienen predilección por su piel tan sumamente blanca y delicada. O incluso por el roce de las costuras de alguna prenda de vestir.
Así que llegó el jueves, y los cuatro granitos parecían un poco infectados, como pequeñas vesículas con liquidillo dentro. "Le ha picado un bicho, fijo", pensé yo en mi gran ignorancia.
Pero el viernes los granitos ya se habían multiplicado, colonizando su cuerpo menudo, y ya me dije "Tate, esto tiene pinta de ser varicela". Fuimos al pediatra, y su diagnóstico confirmó nuestras sospechas.
Del centro de salud salimos con una hoja en la que se explica qué es la varicela: "infección aguda vírica, caracterizada por fiebre más o menos elevada (el Mediano no tuvo, o nosotros no lo percibimos, pues nuestro nene es fuerte como una roca, y para tumbarle tiene que estar mal mal de verdad) y una erupción de vesículas muy característica (¿característica? Discrepo, en nuestro caso empezaron siendo granitos corrientes y molientes, tardaron un tiempecillo en aflorar las vesículas), que pica (al Mediano tampoco le picaban cuando le salieron) y aparece en brotes sucesivos. Suele ser muy benigna. Desaparece en una semana sin dejar cicatrices generalmente. Se supone que la transmisión se produce directamente, de persona a persona, a través de gotitas aéreas. Es muy contagiosa. Es muy importante evitar la sobreinfección de las lesiones, ya que en este caso podrían quedar cicatrices".
"Tratamiento: al ser muy contagiosa, el paciente debe permanecer aislado (para evitar contagios), hasta que se curen todas las lesiones de la piel, que será cuando todas las lesiones tengan "costra". El Ministerio de Sanidad pondrá a disposición de la familia del afectado un hotel de cinco estrellas para que pueda enviar al resto de hermanos y demás parientes a fin de evitar contagios... ah no, esto no lo pone. Pues a ver cómo se mantiene aislado a un niño de cinco años cuando hay otros niños de tres y siete con la mala costumbre de jugar todos juntos, a lo bruto, tocándose, sobándose, aplastándose y apretujándose. Evidentemente, no lo hacemos. Y si el Mayor o el Pequeño han de infectarse, pues mejor que el virus sea de confianza, de casa. Al hilo de esto, de piedra me quedé cuando, brujuleando por la red leí que en EE.UU. y otros países existía la "moda" de las "Fiestas de la varicela": juntar a niños sanos con uno enfermo buscando el contagio, llegando incluso a vender piruletas chupadas por el niño infectado (Chicken-Pox lollipops). Sí, habéis leído bien, VENDER, que de todo hay que sacar ganancia, pues esto es mucho mejor que vacunar al niño. Os dejo el enlace al artículo completo AQUÍ.
A ninguno de mis hijos les puse la vacuna contra la varicela por la sencilla razón de que en mi centro de salud nunca me la ofrecieron ni recomendaron, ni siquiera me hablaron de ella, pues igual que les pusimos -y pagamos religiosamente aquellos 70 euracos por dosis, antes de que fuese gratuita- el Prevenar, gustosamente les habríamos vacunado también contra esta enfermedad.
Siguiendo con la información que nos facilitaron, nos recuerdan que hay que tener muchísimo cuidado en que el enfermo "no esté en contacto con mujeres embarazadas que no han padecido la enfermedad", pues puede ser muy peligroso para el bebé.
Si tiene fiebre hay que darle paracetamol, mucho más preferible que el ibuprofeno, y nunca aspirina ni derivados.
Si no aguanta el picor, puede tomar algún medicamento contra el mismo, siempre recetado por el pediatra. A nosotros nos recetó Atarax, y se lo dimos al niño en un par de ocasiones porque veíamos que el pobre no aguantaba más (mezclado con zumo, por cierto, que los nuestros no se toman una medicina "a pelo" por muchos sobornos, premios, castigos o amenazas que haya de por medio, la vomitan al instante) pero sé de niños (y el propio pediatra así nos lo había comentado) que resisten perfectamente sin rascarse y sin medicina alguna todo el proceso infeccioso.
En cuanto al cuidado de la piel, y para aliviar el picor y la sobreinfección, recomiendan:
- lavar las manos del niño con frecuencia.
- cuidar al máximo la higiene de la piel, debe bañarse diariamente con jabón de avena.
- mantener las uñas del niño bien cortas para que cuando se rasque (son realistas y ya asumen que se va a rascar) no se infecten las lesiones y no queden cicatrices.
- si hay lesiones con aspecto muy inflamado, desinfectarlas -cuando rompan las vesículas- con cristalmina o similar.
- evitar la exposición solar (mala idea contagiarse en primavera-verano, no podía haberlo hecho en invierno).
- no administrar polvos en las lesiones (es decir, no echar Talquistina ni similares, que parece ser que antaño se usaba comúnmente para aliviar el picor).
Y en estas andamos. Con el Mediano infectado, con un granito en la punta de la nariz, otro en la comisura de los labios -y suerte que no tiene dentro de la boca- y otro en el ojo, en el nacimiento de las pestañas -como si fuese un orzuelo megainfectado. Y en la oreja, y bajo la barbilla, y de ahí para abajo en todos lados. Así a todo creo que no tiene demasiados (en las piernas, por ejemplo, apenas un par) ¡ni falta que hace! No sé si le saldrán más, este fin de semana creo que se han "estancado" y no he observado erupciones nuevas. Y aunque el sábado el niño estuvo un poco apagadito y desganado, tirado en el sofá, ayer revivió y hoy ya anda como de costumbre, aprovechando estos días sin cole y jugando con el Peque a esparcir todos los accesorios de los Mr. Potatos, todos los aviones, las Tortugas Ninja, el camión de Manny Manitas y algunos dinosaurios por la sala. Lástima no poder salir a la calle, para un día soleado que tenemos... en fin, el verano está a la vuelta de la esquina, y para entonces ya estará totalmente recuperado.
Pobrecito nuestro Mediano!!! Dentro de nada estará estupendamente :)
ResponderEliminarSeguro que sí!! A ver cuánto tardan en caer los otros dos... :-)
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarGracias! :-)
ResponderEliminarLa Talquistina fue lo que me desaconsejó el pediatra, precisamente!
Ahora a penas se rasca, sólo se arrancó una del cuero cabelludo, pero la que le da más la lata es la de la comisura de los labios. A ver si para la semana ya puede abandonar el enclaustramiento ;-)
Un beso :-)
El de la pestaña se le seco y se le cayo solo? En cuanto tiempo?? Un saludo!
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